Adentrándonos en Space Base
Publicado el 22 diciembre, 2020

La humanidad está en plena expansión espacial, los recursos son abundantes y las posibilidades para hacerse un nombre está al alcance de los más aguerridos y astutos capitanes. Un sin fin de naves y reclutas están a la espera de ser contratados, por el precio adecuado, ayudando así a aumentar su influencia y formar parte de la flota más ilustre de la galaxia.
No os durmáis pues aquí no se puede ni parpadear y como dice el dicho “hasta el infinito y más allá”.
En Space Base nos ponemos al frente de una modesta flota de naves, las cuales están apostadas en nuestras estaciones espaciales, dispersadas a lo largo y ancho de la galaxia. El objetivo es sencillo, habrá que mejorar nuestra flota, utilizando nuestros recursos para ganar influencia y conseguir ascender de capitán de flota a almirante. Esto lo haremos consiguiendo puntos, mandando las distintas naves a explorar y comerciar en los rincones más alejados de los 12 sectores de la galaxia.

Antes de adentrarnos de lleno en esta producción de Maldito Games, vamos a echar un vistazo a los distintos recursos y variables que tiene el juego.
Nuestras bases están representadas por un tablero, que contiene 12 espacios, 1 por sector, los cuales albergarán las distintas naves de nuestra flota. Además tiene un track de conteo para 3 de nuestros recursos:
- Nuestros créditos: estos los iremos acumulando para comprar mejores naves y así aumentar el número de acciones que tendremos disponibles y las recompensas que vamos a obtener.
- Los ingresos: a mayores ingresos, más créditos y por lo tanto podremos obtener mejores naves.
- Los puntos de Victoria: esta es la condición de victoria y representa nuestra influencia para volvernos el siguiente almirante. El objetivo del juego es conseguir 40 de estos puntos.
Todos los jugadores empiezan con la misma flota de 12 naves básicas, posicionadas en cada uno de nuestros sectores. Las naves que podremos obtener están disponibles en un mercado común visible para todos los capitanes y se dividen en 3 niveles dependiendo de su precio, las de nivel 1 son las más baratas y las de nivel 3 las más caras.
Por último, una vez tengamos un nivel de ingresos considerable, también estarán disponibles las cartas de colonia, las cuales se usarán para consolidar nuestro imperio y obtener una gran cantidad de puntos de victoria.

Empezando por el jugador inicial y siguiendo en el sentido horario, se irán tomando turnos los cuales se desarrollan de la siguiente manera:
- Se tiran los dos dados de seis caras, dependiendo del resultado podremos activar las distintas naves desplegadas en nuestros sectores y obtener los beneficios de color azul. Dado que el resultado de cada dado es de 1 a 6 podremos hacer 2 cosas; o bien activar dos sectores distintos que sean del (1 al 6) con cada dado individualmente o activar un único sector sumando ambos dados.
Por ejemplo, si al tirar los dados, se obtiene un 2 y un 5, el jugador podría activar el sector 2 y el sector 5 o por el contrario decidir que el sector 7 da más recompensas y decantarse por él.
Nuestras naves nos darán uno de los tres recursos; créditos, ingreso o puntos de victoria, por lo cual avanzaremos los marcadores correspondientes de nuestras bases.
- Tras activar los sectores correspondientes, el jugador que tiró los dados puede decidir si quiere comprar una nave del mercado central, siempre y cuando tenga los créditos necesarios.
Ahora bien, hay que tener cuidado, porque en el espacio el cambio no existe y nuestros capitanes están obligados a gastar todos sus créditos para pagar la nave que quieran adquirir, véase, si quieres comprar una nave que valga 3 y tu tienes 20, los 17 restantes se perderán en el espacio sideral… Y aquí entra en juego el recurso “ingreso”, ya que cuando gastemos todos nuestros créditos, en vez de quedarnos a 0 pondremos nuestros créditos al nivel de nuestro ingreso, por lo que a medida que subamos los ingresos, nos será más fácil obtener naves más caras.

Dado que nuestras bases en los sectores tienen capacidad para una sola nave, una vez compremos una, la que ya estaba posicionada en el sector se irá a explorar. Esto se representa dando la vuelta a la carta, mostrando la parte roja en el lado superior y escondiéndose detrás de la nave que ocupa el sector.
Aquí acabaría el turno del jugador activo, pero el resto de jugadores van a poder aprovechar sus naves que están explorando, si, esas que tienen la bonificación en rojo en la parte superior. Para ello, usando la tirada de dados del jugador activo, cada uno del resto de jugadores van a poder obtener las bonificaciones en rojo de la misma manera que se obtienen las de color azul, bien activando el resultado de cada dado individualmente o combinando el resultado.
La mecánica principal de este juego es la de “generador de motor de juego” o “engine building”, en la cual, teniendo en cuenta el azar, cada jugador va a poder seguir una estrategia a la hora de comprar y obtener naves. Dado que el azar es un aspecto importante del juego, ¿Qué querrás hacer? ¿Popular todos los sectores de manera equitativa y aumentar así las posibilidades de activar más veces pero con menos recompensa? O por el contrario, ¿tomarás una estrategia audaz, más arriesgada pero con mayor recompensa?
A medida que vayamos obteniendo más y más naves, cada tirada de dados nos brindará más acciones, ya que hay una infinidad de habilidades que nos permitirán combar para obtener más recursos, mover naves de un sector más desfavorable a otro más accesible o incluso robar los puntos de victoria de nuestros contrincantes. Cuando el prestigio y la fama están en juego, todo vale en el amor y la guerra.

Mi valoración de Space Base
Space Base es un filler rápido, divertido y fácil de jugar, ahora bien lo de convertirse en almirante ya es otro cantar. El grado de aleatoriedad hace que la misma estrategia no funcione dos veces y es cierto que los contrincantes podrán sabotear tus compras si ven que te estás desmarcando mucho.
Como ya hemos mencionado es un juego el cual se basa en crear un sistema que nos permita puntuar rápido y hacer turnos cada vez más impresionantes. Obtener recursos en nuestro turno es casi tan importante como poder conseguir más cosas en el turno de nuestros oponentes y es aquí donde cuantos más jugadores estén en la mesa, mayor va a ser la cantidad de recursos que obtendremos y así podremos crear una estrategia con mejores naves antes. Por lo tanto recomendamos este juego para 3 – 4 jugadores, a 2 puede pecar un poco de lentitud. Tras haber jugado 3 o 4 partidas los primeros turnos son en su mayoría muy mecánicos hasta que obtenemos esas preciosas naves de nivel 3.
El estilo de juego recuerda mucho al afamado Machi Koro pero la temática y las condiciones de victoria crea la suficiente distinción como para disfrutarlos sin sentir que es el mismo juego. Al ser un filler sencillo está al alcance de cualquier jugador, ya sea jugón o no y la duración de las partidas y el ritmo de juego hace que no haya turnos muertos o espera entre jugadores, desde luego lo que queremos para representar una carrera espacial.
El arte estilo cartoon de las naves es refrescante, las cartas son bonitas y la iconografía es muy clara y me encantan los cubos transparentes de los distintos recursos, la producción para ser un juego tan simple, es muy acertada y desde luego Maldito Games han hecho un gran trabajo con este título.
Ya para finalizar, queremos comentarles que si les ha gustado este juego, ha sido lanzado con la expansión Estación de Mando que además de expandir el juego también suministra un inserto para el mismo. Además, también ha salido otra expansión llamada Tímido Plutón
—Zeta [Suministrador de Fanáticos]

Space Base
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Space Base: Estación de Mando
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Space Base: Tímido Plutón
Ver productoEtiquetas: filler, Juegos de Mesa, Maldito Games, Space Base
Categorizado en: Juegos de Mesa
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